Un agricultor visita a su médico para un chequeo

Un granjero acude al médico para una revisión. El médico, al verle especialmente estresado, le pregunta cómo le va con su mujer.

El granjero responde: “Bueno, al principio todo iba bien, pero por desgracia hace tiempo que no tenemos intimidad.

¿Por qué? ¿Ya no hay deseo? Sí, lo hay, pero en los momentos equivocados, por ejemplo cuando estoy en el tractor… es que cuando llego a casa,

estoy cansado y todo se desvanece e incluso mi esposa se queja. ¿Qué podemos hacer?

Pues te voy a dar este consejo: cuando vayas al campo, llévate el rifle y cuando te entren ganas,

dispara un tiro al aire para indicarle a tu mujer que ha llegado el momento, ¡que venga a por ti!

Buena idea, la probaré, gracias doctor.

Unos meses más tarde, el granjero volvió a ver al médico, que inmediatamente le preguntó si había seguido su sugerencia.

Por supuesto, doctor, he puesto en práctica su consejo. Bueno, las primeras veces todo fue bien: disparé el arma, ella vino y ¡hicimos un auténtico chapuzón!

Y luego, doctor, el mes pasado abrimos la caza y ¡quién ha visto a mi mujer!