Una mujer acude a la consulta de su médico.
Uno de los nuevos médicos la examina, pero tras unos 4 minutos en la consulta, rompe a gritar y sale corriendo por el pasillo.
Un médico mayor la detuvo y le preguntó qué le pasaba.
Le pidió que se sentara y se relajara en otra sala.
El médico de más edad volvió con la primera y le preguntó: “¿Qué te pasa?
La señora Terry tiene 63 años, cuatro hijos adultos y siete nietos, ¿y usted le dijo que estaba embarazada?”.
El nuevo médico sonrió con suficiencia mientras seguía escribiendo en su portapapeles.
“Aún así le curó el hipo, ¿verdad?”.