Esta mañana he llevado a mi abuelo de 85 años al médico para su revisión anual.
Tras la revisión, el médico le dice que todo está bien y que no va a tener ningún problema en un futuro próximo.
Mi abuelo le dice:
– Tengo una pregunta para usted, doctor: Cuando tenía 25 años,
solía levantarme por la mañana con una erección… tan dura como un tubo de metal. No podía doblarla, ¡ni siquiera con las dos manos!
– Sí”, respondió el doctor, “eso es normal a esa edad.
– Cuando tenía 50 años, podía doblarla con una mano.
– Sí, eso pasa”, dice el Doctor.
– Ahora”, dice el anciano, “¡puedo doblarlo con un solo dedo!
– Bueno, eso es normal a su edad”, responde el médico.
– Pero, doctor, ¿cuándo voy a dejar de ser cada vez más fuerte?